La emoción crea nuestros lazos y así dibuja nuestro mundo personal

Quizá estamos más acostumbrados al aspecto evaluativo de la emoción. En la gestión emocional lo que interesa es la información que nos aporta, la evaluación que hace de la situación de una persona. De ese modo el miedo informa de que existe un peligro del tipo que sea, mientras que el enfado o la rabia nos informa de un obstáculo en nuestro camino o de que nos han arrebatado algo, o de que alguien está pisando nuestro terreno personal. Pero la emoción no es solo información o valoración de la situación, la emoción tiene una dimensión vínculativa. Debido a la emoción nos sentimos vinculados o rechazamos (nos caen mal) personas o cosas o situaciones, todo aquello que vivimos. […]

3 funciones básicas de emociones y sentimientos

Carlos Castilla del Pino (Teoría de los sentimientos, Ed. Tusquets, 2000) distingue 3 funciones básicas en emociones y sentimientos. Estas son: Vinculativa Expresiva Intencional A) Vinculativa. Todas las emociones tienen esta función por la que quedamos ligados a los lugares o personas a las que se refiere la emoción. La función vinculativa actúa sencillamente por el mecanismo básico de la aceptación-rechazo. Es decir vincula positivamente o genera rechazo. De este modo todo el panorama de nuestras emociones, de lo vivido, queda teñido por esta vinculación, es decir queremos repetir la experiencia y volver al sitio o recuperar el objeto o volver a ver a la persona, y en el caso contrario no queremos ni volver ni recuperar el objeto, ni encontrarnos de nuevo con la persona. […]

Los absolutos gramaticales y la comunicación

Resumen: Para la escucha es importante tener en cuenta los absolutos del lenguaje. Estos denotan al sujeto y no tanto a la realidad, sus creencias y su situación emocional. Voy a hablar de un elemento que es importante tener en cuenta en la comunicación, en concreto en la escucha. Especialmente resulta valioso para la escucha del coaching. Se trata de los absolutos que aparecen en una conversación. Hay absolutos en el lenguaje cotidiano, aparecen aquí y allá en las conversaciones. Entiendo por absoluto aquellos términos que no pueden ser dimensionados en la práctica, ya que no pertenecen a una experiencia personal, es decir, no son elaboración de una vivencia. Un ejemplo sencillo es «siempre». No hay una experiencia para «siempre», nadie ha vivido algo que se pueda calificar de «siempre». Como máximo siempre abarca la duración de la vida de quien habla. Esa es la mayor duración posible de siempre en nuestra real experiencia [...]