las 4 dimensiones de la emocion

Quizá estamos más acostumbrados al aspecto evaluativo de la emoción. En la gestión emocional lo que interesa es la información que nos aporta, la evaluación que hace de la situación de una persona. De ese modo el miedo informa de que existe un peligro del tipo que sea, mientras que el enfado o la rabia nos informa de un obstáculo en nuestro camino o de que nos han arrebatado algo, o de que alguien está pisando nuestro terreno personal.

Pero la emoción no es solo información o valoración de la situación, la emoción tiene una dimensión vínculativa. Debido a la emoción nos sentimos vinculados o rechazamos (nos caen mal) personas o cosas o situaciones, todo aquello que vivimos.

Es decir, cuando sentimos una información no solo tenemos una información, también ese “objeto” entra en nuestro mundo y nos vamos a sentir vinculados con él o lo vamos a rechazar. Seguro que esta percepción la tienes clara en tu propia experiencia: te gusta o te cuesta repetir experiencias, te gusta o te cuesta volver a encontrarte con personas concretas.

De este modo se constituye un mundo emocional de vínculos, que es en realidad nuestro mundo el mundo en el que vivimos, que no es un mundo neutro de informaciones, es un mundo de atracciones (me gusta) o de rechazos (que pesadez o que rollo volver a ir a ese restaurante.

Lo que no tiene vínculo emocional, positivo o negativo, nos resulta indiferente, lo que en términos emocionales significa fuera de nuestro mundo. Y ahí seguirá estando hasta que a través de la puerta emocional de la sorpresa nuestro sistema emocional lo vincule y diga: dentro de mi mundo o fuera. Este mundo emocional, es el que en realidad vivimos, y ahí las cosas tienen vínculo emocional, están teñidas del color de la emoción que hemos experimentado al contactarlas.

Nuestros vínculos emocionales dibujan un mapa donde hay personas, cosas y situaciones que nos son queridas y cercanas y personas, cosas y situaciones que evitamos. En su fondo un mapa de amor y odio, y si odio te suena muy fuerte, un mapa de amor y rechazo, un mapa de atracción y evitación. Supongo que en la existencia de este mapa emocional estás de acuerdo conmigo

El instrumento de vinculación más grande de nuestro sistema emocional, la herramienta que utiliza es el enamoramiento. A través de este se crean vínculos muy fuertes que van a estructurar el mundo emocional. En el mapa emocional el enamoramiento es el constructor de las autopistas, de las grandes infraestructuras de conexión. Nuestro mundo de relaciones recorre caminos abiertos por nuestros enamoramientos, esas personas o cosas que nos han encantado y que nos han abierto mundos. Nos gustó la música clásica y por esa puerta entramos a todo un mundo nuevo. Esta experiencia espero que seas capaz de localizarla en tu vida porque te va a indicar las puertas abiertas a nuevos mundos.

El enamoramiento tiene dos sentimientos principales, admiración y encantamiento. La admiración pertenece a la familia de la sorpresa y nos abre desmesuradamente a lo nuevo. El encantamiento nos permite sentir una ilusión integra, nos permite investigar. Supongo que alguna vez has experimentado estos sentimientos, ¿en qué situaciones ha sido?

¿Serías capaz de dibujar tu mapa de vínculos personales y emocionales? Sería muy bueno si pudieses dedicar un tiempo a ello. Comienza por tus enamoramientos, aquello que te gustó mucho, música, motos, pintura,… seguro que encuentras. Y en la semana posterior obsérvate para ver que nuevos vínculos descubres, tanto de atracción como de rechazo, y completa el mapa.

Ese es el mapa de tu mundo. Dedícale un tiempo en el que puedas estar tranquila y escúchate, escucha a tu cuerpo y a tus sensaciones para ver que te dice. Anótalo todo y escríbeme con tus conclusiones.

(Para elaborar el cuadro he utilizado Carlos Castilla del Pino, Teoría de los Sentimientos, añadiendo la dimensión evaluativa).