La adolescencia es la etapa de la formación de la amistad y de su peso en nuestra vida. En la adolescencia los vínculos más importantes tienen que ver con la amistad. De hecho, se quiebra de una forma bastante abrupta la empatía con los menores y desde luego la ruptura con los mayores es la clave de la etapa: encontrar el propio sistema de autoridad y de relaciones, algo que se produce en confrontación con los adultos. Igualmente el propio sistema de valores va a ser elaborado partiendo de esa confrontación y de las quiebras de coherencia en los valores de los adultos.

Esos 3 elementos que marcan las relaciones, descuido de los inferiores, ruptura incluso violenta con los superiores y formación de vínculos entre iguales configuran el mapa relacional del adolescente. Hay que señalar que, en este momento superior, inferior, igual tienen que ver con la edad, que es el criterio por excelencia para las relaciones en la adolescencia. Desde este punto de vista la empatía de la adolescencia está muy mediatizada, de tal modo que pienso que no se la puede llamar empatía, sino que es una empatía recortada, reducida.

Hay que recordar desde el punto de vista de la evolución de nuestra especie, y especialmente con el largo periodo de los cazadores-recolectores, que la transición a la edad adulta es un momento clave de la formación del grupo de cazadores, grupo que va a perdurar a lo largo de la vida adulta. Este grupo va a ser esencial para la supervivencia, lo que concede una importancia clave a las relaciones que se dan en él. Por ello, la amistad, la relación entre iguales adquiere una importancia tan central.

¿La escuela recoge esta importancia crucial de la amistad para el adolescente? En los valores que se profesa defender, sí. Pero ya sabemos que precisamente en los valores se da la distancia más grande entre lo que se dice defender y lo que se defiende de hecho.

Los valores indican la primacía en las elecciones. Un valor real es algo que nos lleva a hacer elecciones por encima de otras posibilidades. Esto nos lleva a la pregunta central: ¿La escuela actúa siguiendo el valor amistad?

La respuesta es no, es más actúa de modo contrario. Todas las distribuciones de alumnos en el aula, se hacen precisamente para separar a los amigos. Hace poco asistí a una convivencia de alumnos adolescentes de un colegio. El leiv-motiv de la convivencia era la amistad, de modo que todas las actividades estaban enfocadas a hablar de la importancia de la amistad. Sin embargo, la primera dinámica estaba concebida precisamente para deshacer los grupos de amigos y organizar grupos de compañeros.

La amistad se lleva mal con las jerarquías, las rompe estableciendo un vínculo entre iguales que es más fuerte que la jerarquía. Esto la escuela lo advierte con fuerza y deshace con persistencia los grupos de amigos cada vez que tiene que organizar grupos.

Los alumnos perciben que la amistad les protege en el grupo y tienden a encerrarse en grupos, que podría llamar grupos de resistencia. Se sienten arropados por los amigos y desde ahí con fuerza para oponerse a indicaciones, romper normas, etc. Los profesores advierten esa resistencia y una de sus estrategias habituales en el aula es deshacer los grupos de amigos, separarlos.

La escuela es un lugar de trabajo y como tal tiene sus objetivos, la existencia de organizaciones fuertes en su seno, tal como son los grupos de amigos, rompe la capacidad de llegar al objetivo. Esto lo indico como un hecho del que más bien hay que tomar nota. Es por esto por lo que los profesores buscan deshacer esos grupos. Pero el hecho conceptúa también de un modo claro el colegio como lugar profesional, también para el alumno, algo que resulta difícil y costoso emocionalmente en edades tempranas y que es una de las incoherencias constitutivas de la escuela tal como como la conocemos.

Tengo una conclusión, tomar nota de la incoherencia: se defiende la amistad en los valores y se combate en el día al día del aula. Eso ya sería un avance muy importante. La escuela por sí misma no fomenta la amistad, que se sale de su ámbito propio. La amistad se forma y se cuida por sí misma.

Resumo: la amistad es fundamental para los adolescentes. En su versión en el aula es una incordio y una dificultad para los docentes y para la gestión del grupo de aprendizaje.