Noor comienza a relacionarse con todos

Noor comienza a relacionarse con todos

En cuanto los niños comienzan a andar alrededor del año de vida comienzan nuevas posibilidades de interacción social. Para el niño es muy importante transitar desde la seguridad de su vínculo de apego a establecer relaciones o realizar actividades que también sean seguras. Esto lo realizan a través de la referencia social: se dirigen a su padre o madre para pedir permiso para hacer algo. Esto lo ha estudiado el laboratorio de Karen Adolf de la Universidad de Nueva York.

Ante una dificultad el niño mirará al padre o la madre para solicitar ayuda, pero esto tiene un límite, si el niño percibe que sus capacidades no dan para superar esa dificultad, no la afrontará, y lo normal es que se eche a llorar solicitando la ayuda del progenitor. Esto sucede ya con 18 meses. El trabajo para enseñarle a afrontar dificultades que objetivamente puede, pero ante las que no se siente capaz, va a ser una clave del aprendizaje de este momento en adelante.

Los niños aún con un apego seguro, optan por obedecer la referencia social solo cuando no están seguros de sus propias habilidades, si están seguros optarán por afrontar la dificultad aún contra el parecer de sus figuras significativas. Esto significa un progreso importante en su autonomía.

La referencia social tiene una importancia clave en la educación ya que indica que estamos preparados precisamente para buscar la aprobación social y el principal lugar de socialización es la escuela para la inmensa mayoría de los niños. Esto quiere decir que el manejo de la referencia social va a estar marcada de un modo determinante por la utilización que hagan los profesores en la escuela.

El profesor es la referencia natural para los alumnos, de este modo posee una autoridad emocional y a él van a acudir de forma natural sus alumnos. Se trata de una fuerte influencia en los alumnos, y cada docente debe ser consciente de que sus expectativas sobre cada alumno influyen precisamente en el modo cómo se plantea los retos cada alumno. Es una dimensión que deben manejar necesariamente y no pueden eludir la necesidad de formarse en Educación Emocional para afrontarla con éxito.