Entrada escrita por Begoña Morales López, profesora de infantil.
Resumen: trabajo con la tristeza en infantil 5 años, utilizando el dibujo como forma de expresión. La necesidad percibida es recibir abrazos. El vínculo a esta edad se expresa preferentemente a través del tacto.
La tristeza es una emoción básica que nos informa de la pérdida de algo o de alguien con el que hemos establecido un vínculo afectivo.
Los adultos por experiencias de la vida hemos sentido esa emoción y sabemos lo que ella conlleva, primero hemos de aceptar que lo que hemos perdido no regresará, y después poco a poco iremos reorganizando nuestra vida. El proceso de duelo es necesario y cada persona necesita su tiempo y su espacio para gestionarlo.
Los niños también tienen sentimientos de tristeza, algunos por pérdidas irrecuperables y otros porque sienten que pierden parte del vínculo emocional que han establecido con sus padres o familiares.
Si vemos a un adulto triste, le acompañamos en su tristeza y le brindamos nuestro apoyo para que la gestione y le acompañamos en su proceso de duelo.
Pero ¿qué nos pasa a los adultos cuando vemos a un niño triste? parece que se nos parte el alma, no podemos ver a un niño triste y enseguida le decimos: “No estés triste” ¿Creéis que así siente que le estamos entendiendo? Yo creo que no. Es necesario por tanto que les brindemos a los niños espacios en el aula en donde puedan expresar su tristeza y digan que necesitan.
En mi aula de 5 años después de narrar el cuento de Margarita (Proyecto Colorines 2º trimestre unidad 3 «Margarita» Ed SM) (en el que Margarita se siente muy triste porque su padre no entiende lo que significa quererle como la sal, y le dice que ya no es su hija). Trabajé con mis alumnos la tristeza: ¿Cuándo te sientes tú triste? ¿Qué necesita tu tristeza?
En la mayor parte de los casos el sentimiento de tristeza está relacionado con la sensación de pérdida del vínculo afectivo con la madre o con los hermanos, en otros casos la emoción aparece cuando se sienten solos y se tienen que enfrentar a algo nuevo y en otros casos ante la muerte de una mascota o la perdida irrecuperable de su objeto de seguridad.
Nosotros adultos, somos el modelo que siguen nuestros hijos y nuestros alumnos, por lo tanto es importante que cuando nos sentimos tristes les expliquemos el por qué y vean cómo nosotros gestionamos nuestra tristeza, solo así ellos aprenderán también a aceptarla y a gestionarla.
Cuadro resumen de las aportaciones de los niños, que hicieron con dibujos.
Cuándo me siento triste | Qué necesito en ese momento |
Cuando ha muerto mi perrita | Mimos de mamá |
Cuando he perdido mi oso | Abrazos de mi oso |
Cuando mamá me regaña | Abrazar a mi oso de peluche |
Cuando mi madre me grita | Abrazos |
Cuando mi hermano llora | Tranquilizarme, respirar hondo |
Cuando mi hermano me pega | Abrazos de mamá |
Cuando nadie me quiere | Un abrazo de Paula |
Cuando fui la primera vez a baile | Abrazos |
Cuando mamá me deja sola | Abrazos y mimos |
Cuando se ríen de mi | Abrazos |
La conclusión como se ve es que lo importante para ellos son los vínculos y lo que necesitan es sentir a través del tacto el vínculo, salvo un niño que dice que necesita tranquilizarse, todos los demás hablan de abrazos.
A lo largo de la entrada os pongo algunos ejemplos de los dibujos que realizaron.
¡Qué curioso! Y una cosa que me ha llamado la atención, ¿hay mayor cercanía a las madres que a los padres? ¿las madres consuelan, o abrazan, o dan mimos… mejor que los padres?
Hola José Luis, Es interesante y preciso tu comentario. Supongo que procede de leer las respuestas de los niños, que no han puesto padre para los abrazos, sino madre. Yo, que soy padre de una niña que ahora tiene 3 años, me resisto a responder que las madres tienen más cercanía y pienso que depende de cada padre y cada madre. Sin embargo sería interesante meterse en el tema cultural y ver qué modelos de padre y madre se ofrecen y si las respuestas de la entrada responden a esos modelos que tiene la cultura y que están muy acendrados.