Cito textualmente el párrafo I del anteproyecto:

La lógica de la reforma se basa en la evolución hacia un sistema capaz de canalizar a los estudiantes hacia las trayectorias mas adecuadas a sus fortalezas, de forma que puedan hacer realidad sus aspiraciones y se conviertan en rutas que faciliten la empleabilidad, a través de la posibilidad para los alumnos y sus padres o tutores de elegir las mejores opciones de desarrollo personal y profesional.

Pienso que este párrafo lo firmaríamos todos o casi, se trata de un objetivo que sintetiza a ojos del ministro, la función del sistema educativo y vamos a darlo por bueno en la primera lectura. Lo importante que debe arbitrar una ley es el cómo: qué medios va a poner en marcha para llegar a ese objetivo. Y parece que el mas importante y casi único desde este punto de vista es instaurar examenes externos en todas las etapas (los de primaria, que son 2 no necesitan ser aprobados). Se parte de la experiencia de los ultimos años de las pruebas CDI, (pruebas de Pruebas de Conocimientos y Destrezas Indispensables a los alumnos de 6º curso de Primaria y de 3º de ESO), que han puesto las pilas especialmente a los colegios, al ver la posición que su institucion ocupa en el ranking que sale publicado.

Es decir se extiende y generaliza la experiencia de los exámenes también a los alumnos. Es decir desde un punto de vista emocional: ¿qué «medios» se ponen para que un alumno coja la ruta de su desarrollo profesional y personal? Muy sencillo de responder: el miedo. Se va a instaurar un sistema de controles y de miedo. Se va a trabajar con los alumnos desde la exigencia de llegar a determinados controles. El miedo va a ser la herramienta básica desde el punto de vista emocional.

El problema es que el miedo es esencialmente conservador y lleva a cerrarse: apunta a conservar, a que no perdamos lo que consideramos esencial para nosotros. Por eso todas las herramientas de desarrollo no se apoyan emocionalmente en el miedo, sino en otras emociones que potencian justamente lo contrario: el abrirse, el descubrir retos, el encontrar objetivos personales que ilusionen, potenciar la motivación. De todo esto no se encuentra rastro en el anteproyecto de ley, por lo que mucho me temo, que tal como resumía ayer un tertuliano del , volvamos al sistema de la letra con sangre entra.

Desde luego esto responde a las motivaciones de la ley que han sido basicamente responder al elevado porcentaje de fracaso escolar, refrendado en todas las evaluaciones internacionales, especialmente el informe PISA. Se trabaja desde suprimir el fracaso, es decir los que elaboran la ley también trabajan desde el miedo y eso es lo que aparece plasmado de forma más evidente en la LOMCE

Desde luego esa parece ser la dirección a la que se apunta: esfuerzo, control, medicion de todos por el mismo nivel… Imagen

Y esta sería mi pregunta fundamental: cuñales serían los medios que posibiliten, tal como dice el texto, descubrir las fortalezas de cada alumno, encontrar para cada uno las mejores opciones de desarrollo personal, encontrar las mejores rutas profesionales adecuadas al alumno…

Me gustaría saber cómo se va a hacer esto