El enfado cuando se complica

Normalmente en Educación Emocional utilizamos las emociones como guía para descubrir nuestras necesidades. Pero no todas las emociones son un buen guía para la acción. Indica la necesidad solo la emoción primaria, la que está en el fondo de nuestro sentir conectado directamente con nuestras tripas, con el hondo de nuestro ser. Especialmente en el enfado es importante distinguir si es una emoción primaria. El enfado tiene una buena capacidad de ser una emoción secundaria y tapar otras emociones. Es el caso de un enfado que tapa una tristeza. En realidad nos sentimos tristes, pero nos cuesta mostrarnos como tristes y mostramos de forma casi automática un enfado para alejar a los que pretendan acercarse para consolar nuestra tristeza. Es muy posible que en nuestra consideración de nosotros mismos estar tristes sea igualado a ser débil. Estas son las situaciones que propician la aparición de un enfado secundario. Hay que darse cuenta que el [...]

Soy una gritona… ¿qué puedo hacer?

He visto recientemente un artículo de la revista SER PADRES que trata este tema y en la búsqueda que he realizado por la web he encontrado también algunas referencias que se centran específicamente en este tema. La más conocida es la página de El Rinoceronte Naranja. Quiero hablar del tema porque no he encontrado ningún tratamiento que sea verdaderamente emocional y pienso que en este caso el enfoque emocional es el que puede resolver la dificultad. Este es un problema que afecta a madres y padres principalmente pero en mi opinión también es muy importante en la escuela, donde los docentes tienen que trabajar precisamente para establecer relaciones de confianza con los alumnos. Y, para ser sinceros, los gritos, las salidas de tono, los enfados mal expresados no ayudan nada a esa confianza. Así que lo hago extensivo a los docentes. […]

El enfado no es la conducta

Efectivamente el enfado tiene mala prensa, muy mala aceptación social y genera muchos rechazos. Sin embargo el enfado es una emoción básica que aparece desde muy pequeños en los niños. Emociones básicas hay solo 6 y el enfado es una de ella. Después del enfado sale toda una familia de sentimientos que en su núcleo nos traen la información de la misma necesidad con matices diferentes. Los matices son importantes. Algunos de esos sentimientos son: ira, cabreo, furia, rabia, cólera, enojo, disgusto, desagrado, irritación, arrebato, contrariedad, etc. Todos aportan matices diversos a una información central: hay algo que es nuestro, que hemos perdido de algún modo o quizá aún nunca hemos poseído, y que nuestro sistema emocional evalúa que lo podemos recuperar. Si se da ese algo, ese objeto al que se dirige el enfado, por perdido de modo definitivo entonces la emoción que surge no es enfado, es tristeza. […]

El parapeto que construye el enfado

Resumen: el enfado construye un parapeto hecho de miedo, desigualdad, energía y concentración en el obstáculo. Todo ello aísla al enfadado. Los demás sienten miedo y se alejan. La gestión del enfado tiene una primera fase de drenaje de la energía, pero no se puede detener en esto sino llegar a un compromiso de acción que satisfaga la necesidad de quien está enfadado. En esta entrada me refiero al enfado como emoción básica, es decir sirve también para las emociones de la familia del enfado: rabia, indignación, cabreo, ira, En mi experiencia he encontrado que el enfado genera miedo y ese miedo al enfado es a la postre su mejor defensa. Las personas que se refugian detrás del enfado, es decir aquellas en las que el enfado es una emoción instrumental, la que dibuja su perfil emocional, consiguen que los demás les tengan miedo y que, por ejemplo, no pidan aquello que de otro [...]

La etapa de la autoafirmación (2 a 3 años)

        Resumen: la 2ª etapa evolutiva. Una vez que ha establecido vínculos, necesita comenzar a lograr una cierta autoafirmación, saber quién es él/ella mism@. Se trata de necesidades de autoestima y reconocimiento. El niñ@ comienza a enfadarse y a decir mío, a referir las cosas a sí mism@.  Es bueno que el niñ@ se enfade. Vamos a tratar la 2ª etapa evolutiva siguiendo libremente a Erik Erikson. La etapa de la autoafirmación (2 a 3 años de edad), que él llama de autonomía. Una vez establecido el vínculo y apoyado en él, el bebé inicia a buscar una cierta autonomía, que en realidad es más bien autoafirmación porque la autonomía es todavía muy precaria. Una vez que ha establecido vínculos, necesita comenzar a lograr una cierta autoafirmación, saber quién es él/ella mism@. El bebe aprende su nombre y qué es alguien diferente de su madre y padre y otras figuras significativas [...]