Resumen: ¿Qué es el coaching emocional como corriente de coaching? Surge de la Terapia Focalizada en las emociones de Leslie Greenberg. Las emociones son la guía de acción. Esto permite ajustarse a las necesidades reales de la persona, tras un acuerdo entre emociones y razón: las emociones proponen, la razón decide. Es una corriente especialmente adecuada para la educación porque se basa en un desarrollo personal. La avalan muchos años de experiencia de ISIE.

Voy a responder en directo al interrogante que abre esta entrada: el coaching emocional es 14243385_suna corriente de coaching, desarrollada en ISIE, que utiliza como base de funcionamiento la Terapia Focalizada en las Emociones de Leslie Greenberg. Es un coaching que utiliza las emociones como guía para la acción, es decir, las emociones no son buenas o malas, sino agradables y desagradables y en todos los casos aportan una información que de forma muy directa apunta a nuestras necesidades. Las necesidades de la persona son así indicadas por el sistema emocional y no por el racional, algo que efectivamente se corresponde con la realidad de nuestro día a día.

Las emociones nos indican lo que necesitamos, la razón sirve para hallar el mejor modo y las posibilidades de llenar esas necesidades, pero el sistema racional no detecta las necesidades, es sencillamente un sistema reflexivo que trabaja con los datos que le aporta el sistema emocional. Con este modo de trabajo se llega a un acuerdo entre emociones y razón, entre lo que indica nuestro sistema emocional y lo que indica nuestra razón. El coaching a partir de las emociones que van aflorando en el proceso centra a las persona en sus necesidades y les hace plantearse y conseguir metas que están realmente muy ajustadas y realistas en su vida personal.

Como necesidades se encuentran las indicadas por Maslow, es decir el hombre es un ser social complejo que tiene toda una pirámide de necesidades y todas hay que tenerlas en cuenta. Estamos en psicología dentro de la corriente denominada psicología humanista, cuyos padres son precisamente Maslow y especialmente Carl Rogers. Además, el coaching emocional recoge todos los avances aportados por la escuela de estos iniciadores, especialmente, como hemos dicho, la de Leslie Greenberg, que aporta una tipología completa de las emociones y un modo concreto de gestión emocional que se denomina Proceso Emocional Básico.

De este modo se estable todo un sistema de gestión de las emociones, que a la vez que son respetadas como el centro de nuestro sistema psíquico, constituyen el motor de la motivación para el cambio que el coaching implica. En ISIE entendemos que sin conexión con las propias emociones no hay motivación real, no en vano el término emoción procede en su raíz latina de motio/motionis movimiento. La razón no proporciona en si misma motivación, a no ser que las razones se encuentren precisamente en línea con lo que la persona necesita y esto, como ya he dicho, lo indican las emociones.

Con todo lo dicho el proceso de coaching emocional es un proceso donde además de dirigirse a metas reales en la vida de la persona, esta inicia un camino de desarrollo personal, no solo consigue metas ajustadas a sus necesidades, sino que aprende a conocerse, a gestionar sus propias emociones, y a conocer sus necesidades reales como la persona que es. En resumen emprende un camino por el que desarrolla su autoconocimiento y sólidamente asentado en este, emprende un camino de potenciación de sus capacidades.

Este sistema de coaching emocional entendemos que tiene una aplicación específica para la educación, aunque no es la única ni puede encerrarse en ese campo. Para la educación resulta especialmente adecuado debido a la unión entre desarrollo personal y consecución de metas, algo que es una de las necesidades más profundas del mundo de la escuela. Lo llevamos aplicando ya muchos años en este terreno y la experiencia no puede ser más positiva.