Escribo esta entrada recogiendo ideas de un blog que me gusta y sigo con agrado porque es sugerente y desde luego muy práctico, algo que siempre envidio; lo que no significa que estoy de acuerdo en todo.
Tim Elmore: WHAT ARE WE TEACHING OUR CHILDREN?
Tim Elmore recoge la situación, muy corriente de padres/madres que buscan quitar dificultades del camino de sus hijos. En concreto se fija en una petición de cambio de clase de una adolescente debido a que su exnovio acudía a la misma clase que ella. Entonces Tim Elmore se pregunta si debemos quitar las dificultades que deben afrontar nuestros hijos.
Yo desde luego no soy nada partidario de eso de quitar las dificultades y las dificultades emocionales de tener enfrente al propio ex, aun dándome cuenta de los problemas que se originan, ni siquiera se me hubiera ocurrido actuar según el principio de “muerto el perro se acabó la rabia”, quitado el ex de en medio, se acabó la dificultad.
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Hay que saber acompañar al adolescente
para que pueda afrontar las dificultades o retos
que se encuentra en la vida.
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Lo que yo pienso es que hay que saber acompañar al adolescente para que pueda afrontar las dificultades o retos que se encuentra en la vida. Algo que desde luego le va a hacer más fuerte para toda su vida. Afrontar dificultades les va a proporcionar un bagaje muy útil para su vida adulta.
- Empatiza con ella/él. Siente su miedo, su dificultad. La empatía con esa edad adolescente, aunque difícil para un padre, es la primera herramienta de trabajo (nadie ha dicho que es fácil acompañar un adolescente, pero si queremos que él/ella afronte, debemos comenzar nosotros)
- Cuéntale las experiencias personales similares por las que has pasado tu misma. No importa que tu época sea muy diferente, quizá mucho más dura… pues explícalo. Y también el coste que eso tuvo para ti.
- Comparte el principio de Benjamín Franklin: “No hay ganancia sin esfuerzo.” Idea que ha estado en la formación desde muchas generaciones atrás. Yo añadiría que todo esfuerzo comporta sufrimiento, un dolor emocional. Esto está en la vida, especialmente si queremos alcanzar metas.
- Habla con ella/él de la estrategia que puede utilizar en el caso que le preocupa. Buscar posibilidades. Pero es clave que sea ella/él quien decida qué debe hacer y cómo.
- Puedes hacer un role-playing sobre los momentos clave: representarlos, hacer un pequeño teatro, y por ejemplo si debe tener una conversación, hacer el papel de interlocutor para ensayarla.
- Habla de las emociones que experimenta, de cómo se siente, de cómo puede gestionarlas. Con esto supongo que tienes un cierto conocimiento y práctica de Educación Emocional.
- No le quites sus luchas. No resuelvas tu la dificultad, eso le hace daño. Díselo además, es importante que afronte sus propios obstáculos.
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Acompañar exige un delicado respeto a la libertad,
poseer competencias emocionales
y, previamente, afrontar nosotros
nuestras propias dificultades.
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He dicho que seguro no es Bueno resolver las dificultades o quitar los obstáculos que encaran nuestros hijos, pero no te he dado un papel más fácil, acompañar exige un delicado respeto a la libertad, poseer competencias emocionales y, previamente, afrontar nosotros nuestras propias dificultades, haber saltado sobre nuestros obstáculos. Este es el desafío de un padre o una madre. Este es tu desafío.
Antes de terminar una pregunta: ¿te gusta el principio de Benjamín Franklin: “No hay ganancia sin esfuerzo”? Porque a mi, por mi experiencia de la vida me parece evidente, pero hay también algo que no me gusta y me gustaría encontrar qué es eso que no me gusta con vuestra ayuda.
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